Hace 10 años atrás, en un día como hoy, llegaba proveniente de la Ciudad de Barcelona después de casi 24 horas de viaje en tren... con tantos sueños, muchos deseos y variadas ilusiones... pero sin jamáz imaginar que una década después estaría todavía viviendo en éste país Europeo.
Recuerdo bien que al llegar a la Ciudad de Treviso, lugar donde vivía Arrigo -"Mi amigo Italiano"-, éste apenas me recibió en su casa me dió 100.000 Liras Italianas "para mis gastos"... un gesto humano-material que por siempre valorizaré y me es de ejemplo que cuando una persona quiere ayudar a otra, de alguna manera puede hacerlo, sin ningún problema. El largo viaje en tren, había comenzado al atardecer del día anterior, con un primer tramo desde Barcelona hasta la Ciudad de Port Bou -Frontera con Francia-; luego por la madrugada, un largo viaje (en compañía de una simpática "Dolly") hasta la Ciudad Fronteriza Italiana de Ventimiglia; después hasta la Stazione di Milano Centrale desde donde con otro tren llegué a Venezia Mestre y de allí fnalmente en media hora, arribé al atardecer a mi destinación final, con más incertezas que ideas a lo que podría suceder en mi vida.
Todo ésta aventura había comenzado en realidad con "él Primer Tour de Argies por Europa", la idea de quedarme "a ver que onda en él Viejo Continente", se concretizó en la Ciudad Capital Catalana. El modo en él cuál se fueron desarrollando los días pasados en Barcelona, me llevó a tomar la decisión de venir a "probar fortuna en ésta Tierra de la cuál tanta gente emigró a país natal", no quería regresar inmediatamente a mi casa y mucho menos me quize aventurar con ir a Estados Unidos. Así fué que "aposté todo a realizar éste viaje", sabiendo que mis días legales por la Comunidad Europea estaban contados y debía arriesgar en mi presente para intentar un futuro diverso. Seguramente "él bajón histórico" a finales de ese año en mi tierra natal fué él detonante de buscar un lugar diverso donde vivir, con lo cual tuve que iniciar a "improvisar", dando inicio a una nueva etapa de mi vida totalmente diversa a la que me había preparado hasta ese momento.
La historia dice que desde aquel día en que llegué a Italia, más allá de diversos intentos, de períodos transitorios y un deseo todavía presente, no cambié de residencia porque aquí he vivido éstos últimos 10 años de mi vida. Muchas emociones, diversas sensaciones e infinidad de recuerdos fueron sumándose a lo largo del camino, como así también ciertas personas que he conocido y me han ayudado de alguna manera a mantenerme en carrera. Remarco él hecho de que jamáz había pensado en que todo ésto iba a suceder, aunque si dentro de mí sé bien que gracias a éste viaje, con él pasar del tiempo he logrado realizar muchos otros viajes de sueños, por lo cual me siento satisfecho por todo lo vivido hasta él día de hoy... sin nunca perder la fé y la esperanza que una vida mejor es posible... lejos del lugar de donde uno nació.... más allá del tiempo y la distancia...
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